Saturday, January 28, 2012

Archbishop Gregory on Freedom of Religion and Conscience

Letter from Archbishop Wilton D. Gregory
Read at all Masses in Parishes in the Archdiocese of Atlanta
Weekend of January 28 – 29, 2012

My dear Brothers and Sisters in Christ,

I am writing to you on a matter of grave moral concern -- freedom of religion and freedom of conscience. The U.S. Department of Health and Human Services announced last week that almost all employers, including Catholic employers, will be forced to offer their employees health coverage that includes sterilization, abortion-inducing drugs, and contraception. Almost all health insurers will be forced to include those “services” in the health policies they write. And almost all individuals will be forced to buy that coverage as a part of their policies.

In so ruling, the Administration has cast aside the First Amendment to the Constitution of the United States, denying to Catholics our Nation’s first and most fundamental freedom, that of religious liberty. And as a result, unless the rule is overturned, we Catholics will be compelled either to violate our consciences, or to drop health coverage for our employees (and suffer the penalties for doing so). The Administration’s sole concession was to give our institutions one year to comply.

I stand in unity with Catholic bishops throughout the United States and other religious leaders vowing to fight this mandate.

Along with my brother bishops and other religious leaders, I insist that this is a direct attack on our religious freedom and our First Amendment rights. I will work with the bishops, other religious leaders and our fellow Americans to remove this unjust regulation.

If the administration will not rescind this violation of our First Amendment rights, we must call on our elected leaders to do so. I ask you to pray that wisdom and justice may prevail, and work together to restore our religious liberty.

Please join me in continuing to follow the development of this important issue and contacting our elected representatives to seek a just resolution.

Through our Georgia Bulletin, archdiocesan and Georgia Catholic Conference websites and other media, I will keep you up to date on the progress of this important issue.

Sincerely yours in Christ,
╬ Wilton D. Gregory
Archbishop of Atlanta


Carta del Arzobispo Wilton D. Gregory y el Obispo Luis R. Zarma

Leída en todas las misas en las parroquias de la Arquidiócesis de Atlanta
28-29 de enero de 2012

Mis queridos hermanos y hermanas en Cristo,

Les escribo para informarles sobre un asunto serio y alarmante que afecta directa la libertad de religión y de consciencia. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos anunció la semana pasada que la mayoría de los empleadores, incluyendo a los de las instituciones católicas, van a ser obligados a ofrecer a sus empleados cobertura de salud que incluyan la esterilización, medicamentos que induzcan el aborto y anticonceptivos. Casi todas las entidades que ofrecen seguro médico serán forzadas a incluir esta cobertura como parte de sus pólizas. Prácticamente todas las personas estarán obligadas a comprar esa cobertura como parte de su póliza.

Con esta decisión, la presente Administración ha hecho a un lado la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, negando a los católicos la primera y más fundamental libertad de nuestra Nación, la libertad religiosa. Como resultado, y a menos que la regulación sea anulada, nosotros los católicos nos veremos obligados o a violar nuestra conciencia y/o a dejar de ofrecer seguro médico y de salud a nuestros empleados (y a sufrir sanciones económicas por ello). La única concesión que hizo la Administración fue dar a nuestras instituciones un año para acatar la orden legislativa.

En unión con los obispos Católicos de los Estados Unidos lucharemos para que esta ley sea revocada.

Con mis hermanos obispos insistimos que esto es un ataque directo a la libertad religiosa y a nuestros derechos bajo la Primera Enmienda. Colaboraremos con otros líderes religiosos para eliminar esta regulación injusta.

Si la administración no rescinde de esta violación de nuestros derechos bajo la Primera Enmienda, debemos hacer un llamado a nuestros líderes políticos que hemos elegido para que ellos lo hagan. Les pido que oremos para que la sabiduría y la justicia prevalezcan, y trabajemos juntos para restaurar nuestra libertad de religión.

Les pido que continuemos vigilantes en el desarrollo de este tema tan importante y que nos comuniquemos con nuestros representantes elegidos para conseguir una resolución justa.

A través del Georgia Bulletin y los demás medios de comunicación de la Arquidiócesis los mantendremos informados del progreso de este asunto.

Sinceramente en Cristo,
Wilton D. Gregory
Arzobispo de Atlanta