Saturday, January 19, 2013

América, defiende la vida!

Homilía Domingo Ordinario 2 C
Padre Paul D. Williams, Jr., párroco San José, Dalton, GA
(Gracias a "Priests for Life" por los recursos.)

Las bodas de Caná no se trata sólo de que Jesús ayuda a una pareja en su necesidad. Se trata de su boda con nosotros, cumpliendo la profecía de Isaías en la primera lectura: "Se casará contigo tu constructor." Jesús, al revelar su gloria públicamente de esta manera y al creer de sus discípulos en él, inaugura el matrimonio que se consumó en la Cruz. El feroz amor que Dios tiene para la vida humana no puede ser exagerado. El agua que se convierte en vino simboliza el hecho de que Jesucristo eleva la vida humana y el amor humano a un nuevo tipo de vida y amor: lo que es compartido dentro de la vida de la Trinidad. Tenemos vida humana; ahora en Cristo somos llamados a participar de la vida divina. Experimentamos el amor humano; ahora en Cristo somos llamados a experimentar el amor divino. Todo está al servicio de la vida humana, llamado al matrimonio divino.

Queridos hermanos y hermanas, estamos aquí en esta misa para adorar a Dios, precisamente porque creemos en Dios, reconocemos a Cristo como El Señor, y adoramos al Espíritu Santo. Dios, desde el principio de las Sagradas Escrituras hasta el final, es el Dios de la vida. El habla de si mismo como el Dios vivo. El Señor Jesucristo dijo "Yo soy la Vida". El Espíritu Santo, según afirmamos en el Credo todos los domingos, es El Señor y Dador de Vida. Por ende, nosotros el pueblo del Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, somos por ese mismo hecho, gente de vida.

El próximo martes, 22 de enero, estaremos conmemorando 40 años de la fecha in-famosa de la decisión de Roe v. Wade, en la cual la mayoría de los miembros de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos desconocieron el ser persona de los seres humanos no nacidos, despenalizando el aborto durante los nueve meses del embarazo, iniciando así, la violación del primero derecho humano de todos: el derecho a la Vida.

Estar con Cristo es estar por la vida y estar por la vida significa que estamos en contra de cualquier cosa que destruya la vida. No hay nada en nuestra sociedad que destruya más a la vida humana que al aborto – ni el crimen, ni las enfermedades, ni los desastres naturales, ni las guerras. En este país, cada veintiséis segundos se comete un aborto, tres mil trescientos abortos diarios.

La ironía de todo esto es que hay gente que promueve esta actividad bajo el lema "libertad de opción", "pro-opción". Pero las mujeres que cometen abortos, no lo hacen por la libertad de opción; lo hacen porque sienten que no tienen libertad y no tienen otra opción. Ellas se sienten atrapadas, abandonadas, desesperadas, con miedo y lamentablemente sienten que no hay nadie a quien puedan ir a menos que sea donde un abortista.
Este día les traigo buenas noticias. La Iglesia y el movimiento pro-vida les queremos decir que hay gente lista para ayudarles, que hay mejores opciones que el aborto. Las mujeres de nuestro país merecen mejores opciones de las que otros les presentan! Que nadie las haga sentir como que la única opción que tienen para solucionar su problema es destruyendo la vida de sus bebés. Hay mejores maneras de resolver los problemas que tenga un individuo y los de toda una nación.

Lo triste es que muchas de las personas que necesitan este tipo de ayuda no saben que la tienen disponible. Pero es ahí donde podemos ayudar. Cada uno de nosotros puede salvar la vida de otro llevándoles a todos la buena noticia de que hay otras opciones al aborto. Hoy yo les doy un camino sencillo para hacerlo. Cuando salgan de esta iglesia, he preparado información que se llaman "Usted puede salvar una vida hoy." Si alguien necesita ayuda y no la recibe, quiero personalmente enterarme de esto.

Hay personas a las cuales solo ustedes pueden alcanzar, abortos que solo ustedes pueden detener, muchas vidas que solo ustedes pueden salvar. Hay niños vivos hoy día, porque gente como ustedes en iglesias como ésta, alrededor de todo el país, cuando escucharon de alguna mujer embarazada que tenía necesidades, le hablaron y le dijeron "no tengas un aborto...hay mejores opciones disponibles!"

Mi padrasto trabaja en varias clínicas pro-vida en el norte de Georgia. Él es un operador de máquinas de ultrasonido, para ver los bebés en el vientre. Él ha salvado más de siete mil niños en estos años. Nadie puede ver un bebé en el vientre y decir que no es una vida humana. Y las clínicas pro-vida ofrecen muchos servicios para las mamás y sus bebés.

En la semana pasada, bauticé dos párvulos nacidos prematuramente. Una niña, un niño. La niña tenía seis meses, y el niño veintidós semanas. Yo los sostuve en mis manos. Tan precioso y hermoso. Nadie puede sostener a un niño en sus manos y decir que no es una vida humana. No. Dios nos regala con niños y los niños en el vientre son iguales con sus niños aquí hoy.

Y no solo tratamos de alcanzar a los que sienten la tentación de tener un aborto, también queremos hablarle a todos aquellos que ya han tenido abortos. A ellos les decimos, "las puertas de la iglesia están abiertas". No rechazaremos ni condenaremos a nadie. Ofrecemos el regreso a la paz, a la misericordia y al perdón de Cristo. Cuando ella deja el pecado, ella recibe de nuevo la paz de Cristo. No se preocupen. Estamos de su lado.

Ser pro-vida significa ser pro-mujer. No significa que amamos a los niños y nos olvidamos de sus madres. Lo que significa es muy sencillo: ¿porqué no podemos amarlos a los dos? ¿porqué no podemos protegerlos a los dos? ¿ porqué no podemos acogerlos y proveer por los dos? podemos y lo haremos.

Y que nadie los engañe con el lema de "pro–opción" suena bien pero si no se habla de lo que se está eligiendo, no se ha dicho verdaderamente nada. ¿Es una decisión particular correcta o equivocada? ¿buena o mala? ¿debería ser permitida o prohibida? ¿acaso no depende de qué es lo que se está optando? ¿Tengo el derecho de ir afuera y golpear sus vehículos? Por supuesto que no, porque mis opciones terminan donde sus derechos comienzan.

Ahora ¿cuál es la opción en cuanto al aborto? algunas personas dicen que es optar por tener o no tener un bebé. Ciertamente la opción de si uno quiere ser mamá o papá es una opción muy propia, no es ni mía ni tampoco del gobierno, es de cada quien.

Pero ¿acaso no es ésa la gran diferencia entre optar por tener o no tener un hijo y matar o no matar a un hijo?. Cuando hablamos de abortos no hablamos si tal ves vengan niños al mundo, estamos hablando de que ya están en este mundo. La pregunta no es si debería traer un niño a este mundo, la pregunta es ¿puedo descartar a un niño?

Cuál es nuestra respuesta? Visito Florida cada año, y cerca de la playa hay un aviso que había sido colocado por las autoridades locales, diciendo: "no tocar las tortugas marinas ni sus huevos, son protegidos bajo las leyes locales, estatales y federales". Bueno, me alegra que las tortugas marinas sean protegidas, pero si en este país no tenemos el derecho de optar si destruir o no un huevo de una tortuga marina, ¿porqué entonces tenemos el derecho a destruir un bebé que no es un huevo pero una vida humana?

Queridos hermanos y hermanas, ¿qué es lo que nosotros, como pueblo de Dios y que decimos que creemos en el Señor de la Vida y decimos que creemos en Dios el creador de todas las cosas, hacemos para confrontar esta tragedia? les puedo decir esto, ya no podemos continuar en silencio, no podemos continuar diciendo que es problema de otros.

El Espíritu Santo viene y nos convierte en un solo cuerpo. De hecho en unos momentos diré las oraciones sobre el pan y el vino y le pediré al Espíritu Santo que descienda y que cambie el pan y el vino y los convierta en el cuerpo y la sangre de Nuestro Señor Jesucristo. Después de la consagración, haré otra oración en la cual le pediré al Espíritu Santo que descienda sobre todos, esa oración dice: "Señor convierte a toda la gente en un solo cuerpo, un solo espíritu en Cristo" ¿qué quiere decir esto? Significa que tenemos la responsabilidad de uno por el otro, no porque elegimos pero por quien somos. Cristo nos ha hecho una sola familia, Cristo nos ha hecho un solo cuerpo, somos responsables los unos de los otros.

No tengamos miedo, que no nos sea indiferente. Ustedes amigos, saben que nuestra religión no es para que nos concentremos sólo en nosotros mismos y en nuestro mundo. Venimos a adorar a Cristo, pero después El nos envía a que vayamos a ese mundo, y que lo convirtamos en un mundo mucho mejor, que hagamos una diferencia. Esa es parte de la adoración a Cristo.

En el Evangelio, la Madre de Dios, nuestra Señora, María Santísima, nos dice, "Hagan lo que el les diga." Y que nos dice el Señor? "Dejen que los niños se acerquen a mí." Como nos dijo el Papa Juan Pablo, "América, defiende la vida!"